En primera persona

La burocracia aspira a agregar “medio Mayabeque”, pero eso no está funcionando y lo dice el primer ministro de Cuba.

El reciente tuit del primer ministro Manuel Marrero Cruz no debería ser pasado por alto. Esos 165 caracteres alertan sobre un problema crucial que no está siendo resuelto y el mensaje es claro: el problema no es la tierra, ni la falta de recursos, sino la burocracia. La falta de respuesta de oferta del agro cubano no se debe solamente a una burocracia flemática, sino a que parece ser que el acento de la estrategia propuesta por la burocracia es equivocado. La información parcial apunta hacia un énfasis en adicionar superficie cultivable. Incrementar rendimientos exige recursos, pero eso es más barato que invertir en habilitar tierras ociosas. Un énfasis desmedido en agregar tierras en 2020 equivale a proponer que se agregue “medio Mayabeque”. Mejor es comenzar por utilizar bien la tierra que ya se cultiva

Recuperando el turismo en medio de la mayor crisis económica global desde 1929: ¿un viaje sin “mapas”?

La recuperación de la actividad turística en Cuba se enfrenta a un triple reto: recuperar una actividad que ya perdía clientes e ingresos antes de la pandemia, la dificultad de reactivar las ventas en condiciones de una demanda deprimida debido a la crisis económica global, y las limitadas posibilidades de que el turismo interno pudiera funcionar como catalizador primario del relanzamiento de la actividad turística en Cuba como parte del proceso mayor de recuperación económica del país. El turismo interno, de residentes en Cuba, pudiera tener un efecto positivo, pero no debería ser significativo. Las mayores posibilidades en los próximos meses pudieran estar en una recuperación de los visitantes de la comunidad cubana.

Gestionando una doble crisis en Cuba: la importación de alimentos

Las importaciones de alimentos son una importante dimensión de la gestión de la crisis doble (epidemiológica y económica) que atraviesa Cuba en 2020. Con la excepción del arroz y en menor medida del trigo, las reducciones de precios del último año pudieran ayudar. Deben asegurarse las importaciones de los 6 principales alimentos importados (pollo, arroz, maíz, trigo, soya, y leche) que en total fueron de aproximadamente 1 250 millones de USD en 2018. Dada la esperada contracción de la disponibilidad de divisas de Cuba en 2020 pudieran existir varias alternativas: a) reducción de importaciones, b) reasignación hacia las importaciones de recursos de otras partes del plan, c) modificaciones en la estructura del consumo, y d) sustitución de importaciones. No queda claro si una reasignación de recursos hacia las importaciones pudiera asegurar los niveles adecuados en el mediano plazo (después de los tres o cuatro primeros meses), de manera que la sustitución de importaciones sería la alternativa a priorizar. Le correspondería presentar argumentos convincentes a quienes consideran que el agro cubano pudiera incrementar actualmente la oferta de alimentos sin que se adopte un programa basado en una mayor disponibilidad de insumos y equipos, incentivos fuertes al productor, y relaciones de mercado

Cuba en tiempos de coronavirus: la necesidad de un programa urgente de seguridad alimentaria

El programa se establecería inicialmente como respuesta a una emergencia sanitaria, pero tendría la ventaja de que también respondería a las necesidades de más largo plazo de tener que enfrentar una crisis económica probablemente muy fuerte. Se necesita una respuesta pragmática. En esta difícil coyuntura, es en el agro donde más se necesita un gato que cace ratones con independencia del color del gato.

Cuba: contradicciones en las tasas de variación de visitantes en 2019

El informe oficial de la ONEI “Servicios informativos No. 12. Turismo. Diciembre 2019” sobre la llegada de visitantes internacionales a Cuba en 2019 y sus tasas de variación respecto al año 2018 parece tener datos erróneos para seis países. Las cifras para 2018 pudieran estar erradas y por tanto las tasas de variación de 2019 en relación con 2018 pudieran estar equivocadas en los casos de la Federación Rusa, Alemania, Francia, España, Italia, y Reino Unido. Cuando se utilizan las cifras del Anuario 2018 cambian las tasas de variación y algunas conclusiones anteriores. Rusia, que había sido reportada como un mercado creciente, habría decrecido en 2019 un 6,8%. Espero que la ONEI pueda aclarar las discrepancias de datos.

¿Hacia una alianza estratégica público-privado en Cuba?

La Universidad de La Habana organizó el 27 de febrero un evento entre emprendedores y viceintendentes municipales bajo el tema “Gobernanza, desde una alianza estratégica público-privado en Cuba”. El principal reto de los emprendedores cubanos es un reto que opera en el largo plazo: poder estructurar un sector privado moderno, con todo lo que eso implica en términos de medios de producción, mercados e innovación. Hay tres grandes obstáculos para el sector privado cubano: la ausencia de empresas privadas legales, la ausencia de mecanismos para el acceso estable al capital, incluyendo las divisas, y la ausencia de un mercado de medios de producción

Las inversiones en Cuba: unas breves observaciones

En relación con la primera parte de la Mesa Redonda (18/2/2020) dedicada al tema de las inversiones en Cuba, existe una discrepancia en la cifra de inversiones ejecutadas en Cuba cuando se comparan los datos ofrecidos en la Mesa Redonda y la información publicada en Cubadebate. Utilizando el gráfico de Cubadebate, la inversión total sería de 10 262 millones en 2019. Utilizando el gráfico de la Mesa Redonda, la inversión total sería de 10 051 millones en 2019. Una diferencia de 211 millones de pesos.

Las ventas de carne de cerdo en Cuba en 2019: comentarios con vistas a una eventual devaluación del peso cubano

En el periodo enero-septiembre de 2019 se vendieron 6 354 toneladas de cerdo en piezas, de las cuales el 90.4% correspondieron a ventas en los Mercados Agropecuarios Estatales (MAE), una contracción de 12,6% en relación con las toneladas vendidas en igual periodo del año anterior. Las ventas de carne de cerdo en los mercados agropecuarios cubanos se encuentran muy concentradas en los MAE y los Mercados de Oferta y Demanda (MOD) no funcionan tanto como competidores de los MAE, sino como un mercado complementario. Los “topes” de precios en los MAE parecen haber impedido la inflación abierta, pero la medida no modificó las condiciones subyacentes de la inflación (el déficit de oferta) y por tanto la inflación se manifestó como inflación reprimida. Para reducir precios, el incremento de la producción es importante, pero la prioridad deben tenerla el aumento de la productividad y la reducción de los costos. Es especialmente complicado tratar de efectuar una transformación estructural que demoraría tiempo en materializar sus posibles efectos positivos cuando, en el corto plazo, funcionaría una complicada “trinidad” –inflación reprimida, carencia de divisas y devaluación- que pudiera elevar notablemente los precios de una de las principales fuentes de proteínas de la dieta del cubano. Se necesitarían acciones de política económica al menos en tres direcciones principales: productividad, modificación del aparato productivo, y subsidios a grupos específicos de consumidores.

Inversión en Cuba en 2020: ¿demasiado optimista y muy desbalanceada?

La evidencia indica que la mejoría de la tasa de inversión en Cuba no ha sido suficiente para dinamizar la economía nacional, la cual
presenta una tendencia hacia cada vez menores tasas de crecimiento económico. El agudo desbalance sectorial es probablemente la característica más sobresaliente de la actual dinámica de la inversión en Cuba. Se justificaría bajo el supuesto de que el turismo funcionase como sector “líder” de la economía cubana, pero eso es algo que no parece estar operando actualmente. Mientras que el por ciento de la inversión se mantenga relativamente estancado en una industria como la cubana, que se encuentra altamente descapitalizada, y que oscile hacia la baja en un sector como el agro, que tiene la menor productividad sectorial del país, muy difícilmente puedan resolverse los déficits de encadenamientos productivos de los que tanto se habla hoy.