Economicismo, chabacanería y otras “lindezas” en el debate económico cubano.

El Dr. García Valdés se refiere a unas supuestas “debilidades de propensión ideológica” respecto a las cuales no aporta la menor evidencia. ¿Cuál habrá sido la apostasía ideológica de Triana? Mientras eso no se aclare, la frase queda simplemente como el golpe bajo de alguien que no comparte un argumento y que, por falta de respuesta, no tiene mejor ocurrencia que tratar de descalificar gratuitamente a quien está criticando.

JORGE GÓMEZ BARATA. Dialéctica en estado práctico

En Cuba y en cualquier otro lugar donde la izquierda procure gestionar una sociedad más justa, el debate acerca de esta dialéctica es pertinente. No lo es el estancamiento a que conlleva el dogmatismo, que no es fidelidad a referentes ideológicos válidos, sino incapacidad para asumir las experiencias históricas y el conocimiento en el punto donde se encuentra.

La lista de “los 48”: racionamiento y mercado en Cuba.

Para tratarse de una medida relativa a productos de primera necesidad -políticamente muy sensibles- la información ha sido sorprendentemente fragmentaria. De hecho, ni siquiera se conoce el listado completo de los 48 productos ni las restricciones cuantitativas que se aplicarían. Ante la falta de información, y de manera preliminar, la lista de “los 48” parecería ser una medida desproporcionada y políticamente problemática.

Breves comentarios de Oscar Mederos y Juan Triana sobre la medición de la pobreza en Cuba

Reaccionando a la entrada anterior de este blog, titulada “La pobreza en Cuba es “relacional’, medible, y superable” (14 de septiembre), los colegas Oscar Mederos Mesa, quien se desempeñó como Director de la Oficina de Estadísticas e Información de Cuba (ONEI), y Juan Triana, destacado investigador y profesor de la Universidad de La Habana, han hecho dos breves comentarios que compartimos con los lectores.

La pobreza en Cuba es “relacional’, medible, y superable.

La pobreza no es simplemente un problema de carencia material. Es un síntoma del funcionamiento de las relaciones sociales. La pobreza no es un accidente. “Algo” tuvo que ocurrir en la sociedad para que determinadas personas fuesen colocadas en ese “lugar” y no en otro. Eso es lo que habría que resolver. Es superable, pero, requiere lidiar con intereses creados y con relaciones de poder. Me refiero a los intereses y al poder en el centro del modelo, no a los que existen en su periferia.